Jorge Ingaramo: Los Clusters y los beneficios de su desarrollo e implementación

Autor: MAIZAR / Fecha: 08/05/06

En diálogo con MAIZAR, el licenciado Jorge Ingaramo, representante de la Bolsa de Cereales, nos habla de los Clusters y los beneficios que podría aportar su desarrollo e implementación para la industria del maíz.

Los Clusters y los beneficios de su desarrollo e implementación


"Trabajo en equipo y comunidad de objetivos: la mejor estrategia para mejorar la producción y la competitividad"
En diálogo con MAIZAR, el licenciado Jorge Ingaramo, miembro de la Comisión Directiva de MAIZAR y representante de la Bolsa de Cereales, nos habla de los Clusters y los beneficios que podría aportar su desarrollo e implementación para la industria del maíz.


- ¿Qué se entiende por Cluster y cuales son sus beneficios para el proceso productivo?
Jorge Ingaramo:
En la literatura económica reciente, ha crecido la idea de la constitución de Clusters, entendiéndose como tales el agrupamiento regional de sectores productivos determinados en torno a alguna ventaja comparativa. El agrupamiento puede partir de la localización geográfica, el costo de mano de obra o de la tecnología y, en algunos casos, la disponibilidad abundante de cierta materia prima. La idea de los clusters, como motivación de política económica y productiva, es distinta al hecho espontáneo de, por ejemplo, una simple ventaja de localización (como el caso del complejo sojero en torno a los puertos de la zona de rosario).
Para que exista un cluster tiene que haber alguna motivación particular por parte de sectores productivos afines, además de políticas públicas cuyos objetivos consistan en hacer que las cosas ocurran de una determinada manera, logrando las sinergias y las ventajas de aglomeración que tiene un cluster.
Las empresas se integran de manera vertical y horizontal, llevando a cabo una acción conjunta en la búsqueda de eficiencia colectiva. Eso se traduce en un accionar definido en materia de política económica, desde el planeamiento de la inversión pública necesaria en laboratorios, centros de estudios e investigación hasta la promoción de los mercados y búsqueda de las alternativas tecnológicas que pueda proveer el resto del mundo.


- ¿Hay algún ejemplo cercano de la constitución de Cluster exitosos?
J.I.:
Sí, por supuesto. El más cercano es la política instrumentada por el sector público chileno para el desarrollo de los clusters de salmónidos en la región sur austral, que hoy exportan por un valor de 1200 millones de dólares partiendo prácticamente de la nada. ¿Y Porqué pudieron llevarse a cabo estos emprendimientos? Porque hubo un esfuerzo común conducente a que se compatibilizaran los intereses privados con los públicos, haciendo cada uno en su esfera lo que le resultaba posible. Así, se hicieron análisis de mercados por parte del estado, y esto ayudó a los pequeños productores a darse cuenta de las ventajas potenciales de la asociación y el trabajo en común. Se creó el instituto de investigación ubicado en una región que aparentemente no tenía muchas ventajas de localización excepto por la disponibilidad de agua, y aún careciendo de mano de obra calificada, el sector privado aportó inversiones que provinieron mayormente de otras ramas de actividad.
Gracias al trabajo en equipo y la comunidad de objetivos, se logró la constitución de un agrupamiento de más de 40 empresas que en conjunto mejoraron enormemente su producción y competitividad exportadora Hoy Chile es el segundo exportador mundial de salmón, sin producir una concentración exagerada de los recursos, ni de las exportaciones, en pocas empresas.


- ¿Cuanto más que una simple unión de empresas es un cluster?
J.I.:
La lógica de un cluster es básicamente generar ventajas para que el todo sea mucho más que la suma de las partes. Esto significa acción coordinada y estratégicamente pensada para que las economías de aglomeración, las economías externas que se van transfiriendo entre empresas y componentes del cluster, predominen por encima de la simple ventaja comparativa que podría tener una localización; por ejemplo, porque un recurso es barato, o está disponible.
Un cluster es una combinación de políticas públicas y decisiones privadas, que concentran inversión, innovación tecnológica, búsqueda de mercado, desarrollo de aptitudes en la mano de obra y especialización del capital para el desarrollo tecnológico. Todo esto hace que el proceso se desarrolle a una velocidad mucho mayor a la espontánea. Estas economías externas son claramente apropiables para la sociedad, porque hay una mejora sustantiva en la calidad de los recursos, la mano de obra, la aptitud de learning by doing, es decir: aprender a medida que se van descubriendo los problemas que tiene el proceso e ir resolviéndolos de manera conjunta.


- ¿Cómo podría aplicarse este desarrollo en el caso del Maíz?
J.I.:
El objetivo final es el incremento del valor agregado, la creación conjunta de riqueza y lograr mejoras en la calidad y la cantidad ofrecida. Nuestras exportaciones tienen un alto contenido de recursos naturales, con bajo valor unitario. El estado de cosas actual se puede revertir planteando "fábricas de proteínas" de origen animal, en base a maíz.
En el caso del maíz, primero habría que definir el modelo, teniendo en cuenta que el maíz padece una desventaja por su bajo valor en términos de peso y el costo del flete. Esa particularidad lo condena a que su exportación como grano solo sea posible con una explotación cercana a zonas portuarias, no más de 300 kilómetros conforme los precios actuales. La única vía para remontar esta situación es el desarrollo de clusters de industrialización en las zonas productoras.
Si tenemos en cuenta el abismo que separa a la Argentina del desarrollo brasileño en cerdos y pollos, surge con claridad que habría que promover esta actividad conjuntamente con el Estado y los particulares, en las zonas aptas con mayor distancia a puerto. Esta alternativa permitiría el logro de variados objetivos: 1°, la industrialización en origen; 2°, una mejora en la calificación de la mano de obra; 3°, el aumento del empleo; 4°, el aliento e impulso a las economías regionales, y 5°, lo más importante, la valorización de la materia prima, por la generación de uno o varios productos de mayor valor.
Debe advertirse que en los casos que ya hemos señalado del pollo y del cerdo, hay muchas zonas que son importadoras netas de estos productos. Podemos tomar, por ejemplo, el caso del NOA, donde se traen pollos y cerdos de otras regiones del país. Promover un cluster en esta región sería una sustitución de importaciones inteligente, no la búsqueda de una protección artificial, sino el verdadero aprovechamiento de una ventaja de localización que para el maíz es una desventaja, pero que para su industrialización se podría convertir en una virtud.
Llevar a cabo este tipo de emprendimientos no es fácil. Requiere de una planificación estratégica estrictamente coordinada entre el sector privado y el público. En esencia: lo que llamamos un buen gerenciamiento, flanco débil sobre todo en la organización estatal. Nuestro país está muy concentrado en la zona litoral portuaria, y muy poco abastecido de información acerca de los desarrollos productivos locales. Sin embargo, los productores privados asentados en estos lugares, conocen los problemas.


- ¿Qué papel le cabría a MAIZAR en la instrumentación de este proceso?
J.I.:
Como afirmamos anteriormente, estos emprendimientos complejos se llevan adelante con buen gerenciamiento, encuadrado en un plan estratégico que promueva e impulse la idea. MAIZAR sería el promotor del proceso, buscando y agrupando a los productores interesados y evaluando las diferentes posibilidades de proyectos para la creación de los cluster. Habría que tomar la actitud de coordinar los esfuerzos buscando empresarios que lideren esta gestión y, por supuesto, coordinar y gestionar la demanda de apoyo necesario al sector público.
Actualmente, MAIZAR está planteando la posibilidad de realizar un emprendimiento con estas características en la provincia de Entre Ríos, desarrollando un cluster para la producción de pollos y eventualmente cerdos. Sucede que gran parte del Maíz que se produce en esa provincia es enviado a Rosario para ser exportado, al tiempo que los avicultores y otros procesadores compran maíz en el sur de Córdoba. Maizar plantea la hipótesis de un nuevo negocio con las características del cluster. Esa hipótesis de trabajo se traslada a un conjunto de productores y representantes de toda la cadena de valor, gobierno y demás sectores representativos para interesarlos y testear su viabilidad a través de encuestas.